Me fui de Misiones a Oaxaca, a un pueblo llamado "Brenatorres",  este pueblo esta alejado de la Ciudad y del Centro de Oaxaca, por tal motivo las personas que habitan en ese y en diferentes pueblos de la Ciudad carecen de recursos, son personas muy pobres pero realmente humildes. Quiero compartirles mi experiencia.

Nunca había estado mas de un día ayudando en un pueblo, y mucho menos hospedándome ahí, ha sido mi primera experiencia, tuve que quedarme 1 semana viviendo con una familia del pueblo en semana santa, éramos 16 misioneros pero nos repartimos en parejas en las diferentes comunidades,
Al principio me sentía muy nerviosa porque todo era ajeno a mi , excepto mi amiga ( con la que me quede en el pueblo), el calor era muy fuerte, no tenia comodidades como en mi casa y comenzaba a quejarme dentro de mi. Las personas de la casa nos trataban como de su familia, si no es que hasta mejor, no tenían colchones para dormir, ellos duermen en catres y ese día hicieron uno para nosotras ( fue un acto muy humilde), extrañaba mi hogar pero saben que me di cuenta?, que jamás deje mi hogar porque ellos me hacían sentir como en casa.
Esta experiencia ha sido una de las mejores de mi vida, a pesar de que me fui en Semana Santa ( la única semana de vacaciones) y otras personas estaban disfrutando de la playa y de lujos, no me arrepiento de  haber vivido esta experiencia porque de cada una de las personas que voy conociendo me llevo lo mejor de ellas y me han enseñado muchísimas cosas y me han dejado mucho mas de lo que yo deje ahí.
Ellos son felices a pesar de la forma de vida que tienen ,todo el tiempo me regalaron una sonrisa.
Ahora en Junio, me volveré a ir y les traeré de nuevo fotos y les contare otra nueva experiencia...
No se cual sea mi misión en la vida, pero las que he hecho, me han llenado el alma de paz...​